sábado, 8 de mayo de 2021

Kim Ki-duk - Samaritan Girl


Como uno de los clásicos cuentos de hadas popularizados por los hermanos Grimm, Samaritan Girl es un relato en apariencia inocente que su desarrollo permite revelar algo sombrío subyacente.
Dos adolescentes: mientras Jae-yeong (Han Yeo-reum) se prostituye con la intención de redimir a sus clientes; Yeo-jin (Kwak Ji-min) se dedica a concertar las citas y atesorar el dinero con el propósito más prosaico de reunir la cantidad suficiente para viajar a Europa.
Samaritan Girl es otra fábula religioso-moral de Kim Ki-duk acerca de la posibilidad de salvación; cuyas protagonistas son mujeres que toman decisiones, cuestionables o no, pero que entrañan el ejercicio del libre albedrío; y a su lado, están hombres incapaces de aceptar esa potestad, cuya respuesta única es la violencia.
Esta nueva parábola es una excusa para Kim Ki-duk de volver a proyectar su obsesión acerca de una sociedad en la cual la disparidad en la autoridad asignada a los roles del hombre y la mujer parece ser tan rigurosa que no existe suficiente espacio para una comunicación donde emisor y receptor estén situados en un plano de igualdad.
Pero el discurso fuerte, extremo, oscuro del realizador coreano, no es necesariamente pesimista, y habitualmente ofrece, si bien no una solución, al menos la oportunidad de reflexionar con el objeto de encontrar una solución concreta al conflicto planteado; y al mismo tiempo, amortiguar el efecto de sus duras imágenes para tranquilidad de los espectadores impresionables.